Historia
Este ferrocarril fue construido por The Braden Copper Company, empresa estadounidense fundada en 1904 y propietaria en ese entonces del mineral de cobre de El Teniente, en la cordillera de Los Andes frente a Rancagua.
Su trocha fue de 76 cm y su recorrido tenía alrededor de 70 km de longitud. El trazado se iniciaba en el ''Patio Rancagua'', un complejo de instalaciones destinados a servir como punto de transferencia de carga desde este ferrocarril a FFCC del Estado. Además en ese lugar se realizaba el acopio temporal de mineral y maquinaria, existían talleres y oficinas administrativas y un sinfin de actividades asociadas a la operacion minera y ferroviaria. Todo esto en el costado sur-poniente de la estación de Rancagua.
La ruta, cuya orientacion general era de poniente a oriente, recorría algunos kilómetros de terreno llano en las cercanías de Rancagua, para luego enfrentar la cordillera recorriendo tramos extremadamente difíciles de montaña hasta llegar a Sewell, campamento minero que albergaba a los trabajadores de la mina.
Las obras de construcción se iniciaron en 1907, siendo terminado en 1911, aunque en 1916 se debió reconstruir para solucionar una serie de problemas técnicos provocados fundamentalmente por el criterio inicial de construirlo a muy bajo costo. Debieron ser ampliadas una serie de curvas, fueron reemplazados los puentes originales de madera por estructuras de acero, se cambiaron los rieles por otros que resistieran mayor peso, etc.
Posteriormente fue extendido hasta El Teniente y en 1919 se construyó un ramal de 2.6 km que partia desde la estación Colón a la fundición de Caletones.
En sus primeros años, fue operado casi exclusivamente con locomotoras del tipo Shay, construidas por Lima en Ohio, Estados Unidos. Estas locomotoras estaban dotadas de un curioso sistema de cilindros verticales ubicados a un costado de la caldera y que transferían su fuerza motriz a un cigüeñal, el que luego distribuía el movimiento a las ruedas mediante piñones.
Su diseño, unido a que sus rueda motrices se encontraban montadas sobre boguies, les permitía operar muy eficientemente a bajas velocidades con mucha carga y sobre curvas muy cerradas
Este ferrocarril, junto con la mina y el campamento minero de Sewell contaban con una serie de curiosidades que lo hacen sumamente especial.
Dado que la mina de El Teniente se encuentra en una zona de alta montaña, el acceso hasta ella era muy dificil en los primeros años de explotación, por lo que sus propietarios debieron construir una verdadera ciudad en las cercanías para albergar a los trabajadores. Esta ciudad se ubicó en la ladera de un cerro y la constitución de sus edificios y calles la hicieron conocida como ''La ciudad de las escaleras''. Existían todos los servicios básicos e incluso comodidades que ni siquiera existían en Rancagua. La empresa se preocupaba por el bienestar de sus trabajadores en forma integral, estableciendo reglamentos que aseguraban la buena convivencia de los trabajadores, la presencia permanente de las familias de estos, cuando eran casados, actividades culturales y recreativas y todo lo necesario para mantener comodos a los empleados.
Por todo ello, aunque el objetivo principal del ferrocarril era el transporte de mineral y de insumos, también tenía un servicio de pasajeros para los empleados y el público mediante trenes con coches de madera.
La empresa tambien se caractrerizó por construir buena parte del material rodante necesario adaptando o fabricando integramente autocarriles para el transporte de los altos ejecutivos. Por ello, era posible ver sobre las vias camionetas, autos y ''micros'' de pasajeros, más livianos y rápidos que los trenes convencionales.
A principios de los años 50 se reemplazaron las locomotoras a vapor por otras diesel, abandonándose finalmente este ferrocarril en 1978, para ser reemplazado por una carretera. El mineral de El Teniente pasó a ser controlado por el Estado de Chile entre 1966 y 1971 por lo que su administración quedó en manos de Codelco (empresa minera estatal). En la actualidad, Codelco sigue operando un ferrocarril eléctrico con trocha Stephenson (1.435 mm) solo en el área industrial, por lo que luego el mineral debe ser transportado en camiones.
Una vez que la carretera y los medios modernos de transporte permitieron que los trabajadores pudieran vivir en Rancagua y viajar rápidamente hasta su trabajo en la mina, el campamento de Sewell fue despoblado. Aunque se alcanzaron a desmantelar una buena parte de las instalaciones, se conserva hasta hoy una buena cantidad de edificios que se utilizan con fines turísticos.
Fuentes
- "Historia del Ferrocarril en Chile", Ian Thomson y Dietrich Angerstein, DIBAM, 2000
- Fotos: Miguel Tarsetti y Sitio web de locomotoras Shay http://www.shaylocomotives.com/
Galería de fotos
La mayoría de las siguientes fotografías son un aporte de Miguel Tarsetti
Mapa aéreo del trazado
NOTA: Toda la sección marcada con linea naranja corresponde a la ubicación tentativa de la vía y las estaciones. Lamentablemente aún no hemos logrado establecer la ruta definitiva. Si puedes ayudarnos a corregirla o confirmarla contáctate con nosotros.
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Acerca del autor
Ernesto Vargas es un apasionado del mundo ferroviario y un profundo admirador de las obras de arte asociadas a la vía ferrea asi como de sus contructores.
Nacido en San Felipe, vive desde hace más de 30 años en la ciudad de Santiago, desempeñandose en una empresa relacionada con la tecnología y las comunicaciones.
Durante muchos años se ha dedicado a desarrollar y mantener una serie de sitios web dedicados a la investigación y difusión de la historia ferroviaria y de todo lo que se relaciona con ello. Asi es como desde el año 2001 es el webmaster y responsable del sitio Amigos del Tren y desde el 2020 de El Ferrocarril en Chile.